(mujerhacendosa.weebly.com)
"A ser prudentes, castas, cuidadosas de su casa, buenas, sujetas a sus maridos, para que la palabra de Dios no sea blasfemada" Tito 2:5.
La Palabra de Dios nos presenta en Tito 2:5, que la mujer debe ser cuidadosa del hogar. Las hijas de Dios, deben procurar tener un hogar cuidado y organizado para el bienestar de ella y de su familia. A el Señor le interesa que sus hijos estén en hogares placenteros. Por otra parte, ¿Cómo te sientes cuando estás en un lugar desordenado y de poca higiene? Como hijas de Dios, no podemos sentirnos cómodas en un lugar así ya que esto va en contra de lo que Él expone en su Palabra. Nuestras casas deben reflejar que somos hijas de Dios y que estamos siendo obedientes a Él, para que su Palabra no sea blasfemada (Tito 2:5). En otras palabras, un hogar desordenado y sucio empaña el nombre de Dios.
¿Cómo podemos tener hogares limpios y organizados?
Estableciendo prioridades… Nosotras tenemos que establecer prioridades y tener vidas organizadas. No podemos vivir desordenadamente. El tener una casa bien cuidada requiere aplastar muchos de nuestros deseos carnales ("Digo, pues: Andad en el Espíritu, y no satisfagáis los deseos de la carne" Gálatas 5:16).Por ejemplo, despertarse tarde, ver televisión y navegar en el internet por largos periodos de tiempo, estar con amigas o hermanas en cosas vanas, entre otras actividades. El día tiene 24 horas, de esas 24 horas se recomienda dormir 8 horas, nos restan 16 horas. Esas 16 horas deben ser bien empleadas y distribuidas. Sabemos que nuestro tiempo es de Dios y que tenemos que hacer todo para la gloria de Él ("Si, pues, coméis o bebéis, o hacéis otra cosa, hacedlo todo para la gloria de Dios" 1 Corintios 10:31). A través del cuidado de nuestro hogar, le glorificamos a Él porque así Él lo desea (Tito 2:5).
A continuación algunas recomendaciones para ser una mujer hacendosa del hogar:
*Recomendación: Si estás acostumbrada a pasar
mucho tiempo con amigas/hermanas, se sincera y
comparteles que deseas obedecer a Dios. Has
referencia a la Biblia (Tito 2:5).
Cuando cuidamos nuestros hogares somos obedientes a Dios; es un acto de obediencia a lo que dice su Palabra. El Señor nos ha confiado nuestros hogares y tenemos que ser responsables ante lo que Él nos ha dado. No podemos tener una actitud de descuido ante su Palabra. De esta manera seríamos mujeres desobedientes. El Señor ha tenido misericordia para nosotras, seamos obedientes a Él.
" He aquí yo vengo pronto, y mi galardón conmigo, para recompensar a cada uno según sea su obra" Apocalipsis 22:12.
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